El hemograma completo es una herramienta diagnóstica esencial en la medicina veterinaria, proporcionando una visión integral del estado hematológico del paciente. Esta prueba incluye el recuento de glóbulos rojos, glóbulos blancos y plaquetas, así como la medición de hemoglobina y hematocrito. La interpretación detallada del hemograma puede revelar información crítica sobre una amplia gama de condiciones, desde anemias y infecciones hasta enfermedades hematológicas malignas.
Un aspecto clave de la interpretación del hemograma es la evaluación de los índices eritrocitarios, como el volumen corpuscular medio (VCM) y la hemoglobina corpuscular media (HCM). Estos índices ayudan a clasificar las anemias y orientar el diagnóstico diferencial. Por ejemplo, una anemia microcítica hipocrómica sugiere deficiencia de hierro o enfermedades crónicas, mientras que una anemia macrocítica puede indicar deficiencia de vitamina B12 o ácido fólico.
El recuento y la morfología de los glóbulos blancos también proporcionan información valiosa sobre el estado inmunológico del paciente. Un aumento en los neutrófilos segmentados puede indicar una infección bacteriana aguda, mientras que un aumento en los linfocitos puede ser signo de una infección viral o una respuesta inmune crónica. La presencia de células inmaduras o anormales, como los blastos, puede ser indicativa de una enfermedad hematológica grave como la leucemia.
Además, el recuento de plaquetas y la evaluación de su morfología son cruciales para identificar trastornos de la coagulación y trombocitopenias. Las plaquetas gigantes o fragmentadas pueden sugerir enfermedades mieloproliferativas o destrucción periférica.
Para realizar un hemograma completo, se utiliza el tubo lila (tapa morada) que contiene EDTA (ácido etilendiaminotetraacético) como anticoagulante. El EDTA es el anticoagulante preferido para los hemogramas porque preserva bien las células sanguíneas y evita la coagulación al quelar el calcio en la sangre. A continuación se detallan las características y el uso del tubo lila en la realización de un hemograma completo:
Uso: Utilizado para obtener sangre completa sin coagular para el análisis hematológico.
Aplicaciones:
- Recuento de Glóbulos Rojos (RBC): Evalúa el número de eritrocitos en la sangre.
- Recuento de Glóbulos Blancos (WBC): Mide el número total de leucocitos y puede diferenciar entre diferentes tipos de leucocitos (neutrófilos, linfocitos, monocitos, eosinófilos y basófilos).
- Recuento de Plaquetas (PLT): Determina el número de plaquetas en la sangre, crucial para evaluar la función hemostática.
- Hemoglobina (Hb): Mide la cantidad de hemoglobina, importante para evaluar el transporte de oxígeno.
- Hematocrito (HCT): Calcula el porcentaje de volumen sanguíneo ocupado por los eritrocitos.
- Índices Eritrocitarios: Incluyen el volumen corpuscular medio (VCM), la hemoglobina corpuscular media (HCM) y la concentración de hemoglobina corpuscular media (CHCM).
- Frotis de Sangre: Puede ser preparado para una evaluación microscópica de la morfología celular.
Ventajas:
- • Preservación de Células: El EDTA evita la coagulación y preserva la morfología de las células sanguíneas, lo cual es crucial para un análisis preciso.
- • Estabilidad de la Muestra: Las muestras de sangre tratadas con EDTA son estables durante varias horas a temperatura ambiente, permitiendo un procesamiento adecuado en el laboratorio.
- • Uso Versátil: Adecuado para una amplia gama de pruebas hematológicas y no interfiere significativamente con la mayoría de los análisis celulares.
Procedimiento de Recolección y Manipulación
- Recolección: El tubo debe ser llenado hasta la marca indicada para asegurar la proporción correcta de EDTA y sangre.
- Mezcla: Después de la recolección, el tubo debe ser invertido suavemente varias veces (generalmente 8-10 veces) para mezclar bien la sangre con el EDTA y evitar la coagulación.
- Transporte y Almacenamiento: Las muestras deben ser transportadas y almacenadas a temperatura ambiente si se analizan rápidamente. Si se requiere almacenamiento prolongado, las muestras pueden ser refrigeradas, pero no congeladas.
- Centrifugación: Generalmente no se centrifuga el tubo con EDTA para los hemogramas, ya que el análisis se realiza con sangre completa.
En resumen, el tubo lila con EDTA es el tipo de tubo requerido para realizar un hemograma completo. Este tubo permite la recolección y preservación adecuada de la sangre, asegurando resultados precisos y confiables en el análisis hematológico.